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Publicada originalmente en 1995 y actualizada en varias ediciones hasta 2014, "El fútbol a sol y sombra" se ha convertido en el libro más traducido y leído de Eduardo Galeano. No es un tratado deportivo ni una crónica convencional: es una obra maestra de la literatura latinoamericana que transforma el juego más popular del planeta en espejo de la condición humana.
“El fútbol a sol y sombra” es el título de la originalísima y chispeante obra del escritor uruguayo Eduardo Galeano (1940-2015), que contribuye a tener un conocimiento más acabado sobre diversos aspectos e interioridades del popular y apasionante deporte. En sus páginas, el lector podrá recorrer sus mitos, su historia y personajes emblemáticos y —por supuesto— sin evadir en absoluto críticas a uno de los espectáculos más lucrativos del planeta manejado por la FIFA: la Copa Mundial de Fútbol, el evento de mayor envergadura a nivel de selecciones nacionales.
Galeano fue un apasionado de este deporte durante toda su existencia; quien se autodefine como "un mendigo del buen fútbol, que recorre los estadios y pide una linda jugadita, por el amor de Dios”; pero que no miente para decir duras verdades como cuando afirma que “el fútbol profesional condena lo que es inútil, es inútil lo que no es rentable”.
La prosa de Galeano es pura alquimia. El recordado autor uruguayo combina la precisión del cronista con la lírica del poeta. Frases del estilo de: “el gol es el orgasmo del fútbol” —como el orgasmo, el gol es cada vez menos frecuente en la vida moderna—, o bien “muchos países pobres son ricos en futbolistas pobres”, o incluso: “el fútbol es la patria de los que no tienen patria” se han convertido ya en citas universales. Su tono oscila entre la celebración pagana y la elegía por un juego que se aleja de sus orígenes populares.
En otra de sus salidas se pregunta, ¿en qué se parece el fútbol a Dios? Y él mismo se responde:
“…en la devoción que le tienen muchos creyentes y en la desconfianza que le tienen muchos intelectuales.”
Y explica que el desprecio de muchos intelectuales conservadores se funda en la certeza de que la idolatría de la pelota es la superstición que el pueblo merece. Poseída por el fútbol, la plebe piensa con los pies, que es lo suyo. El instinto animal —sostiene— se impone a la razón humana, la ignorancia aplasta a la cultura, y así la chusma tiene lo que quiere.
El libro permite —de acuerdo con el prólogo— acercarse a una mirada sobre el fútbol y contiene una galería que va desde Maradona a Pelé, pasando por Garrincha y Sanfilippo, y dedica un apartado a su invención de la llamada “Teoría Lionel Messi”, dedicada al superastro argentino surgido en el Barcelona, y hoy líder indiscutido en la MLS .
Galeano describe al fútbol como “la única religión que no tiene ateos”. Los estadios son catedrales laicas donde se celebran ritos de identidad, pertenencia y resistencia. Sin embargo, no idealiza: denuncia con igual pasión la corrupción de la FIFA, el racismo persistente, la esclavitud moderna de los futbolistas menores en África y el “fútbol de galería” que prioriza el espectáculo sobre la esencia.
Entre los subtítulos más llamativos se destacan, El fútbol, “¿El opio de los pueblos?, la pelota como bandera, estadio, el hincha. Sobre este, dice que una vez por semana, el hincha huye de su casa y asiste al estadio, rara vez dice: “hoy juega mi club”. Más bien dice: “Hoy jugamos nosotros".
Y continúa Galeano, con esa prosa tan urbana como exquisita: "Bien sabe este jugador número doce que es él quien sopla los vientos de fervor que empujan la pelota cuando ella se duerme, como bien saben los otros once jugadores que jugar sin hinchada es como bailar sin música”.
Actualizado por el propio Galeano hasta la edición de 2014 —poco antes de su muerte en 2015—, el libro incorporó capítulos sobre el Mundial de Brasil, la irrupción de Lionel Messi y la resistencia de los hinchas contra la comercialización. Treinta años después de su primera edición, sigue siendo el texto de referencia para entender el fútbol como fenómeno cultural, político y emocional en América Latina y más allá.
En las tribunas de Buenos Aires, en las aulas de Barcelona o en los autobuses de Ciudad de México, El fútbol a sol y sombra es una obra literaria amena y muy recomendable. El autor pone de manifiesto en ella que, cuando el balón rueda con libertad, también rueda la historia de los pueblos. Un libro que no envejece porque, como el propio fútbol, late con la misma pasión de siempre.
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