MADRID — Si alguien quería pruebas de que este Atlético viene con hambre competitivo, las tuvo la noche del martes 30. Con Diego Simeone suspendido y obligado a observar desde la grada, los rojiblancos ofrecieron una versión ofensiva imparable para humillar al Eintracht Frankfurt 5-1 en la segunda fecha de la fase de grupos de la UEFA Champions League.
Un vendaval desde el inicio
No esperaron los locales. Apenas al minuto 4’, Giacomo Raspadori abrió el marcador con un remate dentro del área, tras una jugada que se desvió ligeramente y dejó sin opciones al arquero. Con ese chapuzón de confianza, el Atlético se adueñó del ritmo del juego.
Cuando el reloj marcaba 33', un desborde por banda derecha derivó en un centro combatido en el área, y en el rebote apareció Robin Le Normand para empujar el balón con determinación: 2-0.
Antes del final del primer tiempo, a los 46', Antoine Griezmann se hizo presente con un gol íntimo, conectando un pase bajo de Julián Álvarez para anotar. Con ese tanto, el francés alcanzó su gol 200 con el Atlético y lo celebró sosteniendo una camiseta con el número 200 ante la enfervorecida hinchada.

Frankfurt intenta reaccionar… pero Atlético no afloja
En el segundo tiempo, el Eintracht dio un aviso: Jonathan Burkardt recortó distancias al minuto 58’, con un disparo preciso al rincón que sorprendió al arquero Jan Oblak.
Pero el impulso visitante duró poco. En el minuto 70’, un tiro de esquina ejecutado por “la Araña” Álvarez fue cabeceado con contundencia por Giuliano Simeone, el hijo del entrenador, que puso el marcador 4-1 con frialdad. Un gol confeccionado con 100% de talento argentino.
Para sellar la noche, el Atlético recibió un penal revisado por VAR por mano dentro del área. Álvarez se encargó de ejecutarlo con un “Panenka” sutil que engañó al portero y definir la goleada 5-1.
Con esa contundencia, el Atlético cerró el partido con control, dejando en claro que su potencia ofensiva no depende solo de un nombre, sino de opciones múltiples.
Diez goles en “cuarenta y ocho horas”
Lo más asombroso no es solo la goleada a Frankfurt, sino que el Atlético ha marcado 10 goles en apenas dos partidos oficiales: 5 frente al Real Madrid el sábado 27 (derbi que ganaron 5-2) y otros 5 hoy ante un rival europeo. Esa voracidad goleadora habla de un equipo que no se amilana ante escenarios exigentes, sino que busca imponerse siempre con amplitud.
Con información e imágenes de:
Reuters
El País
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