CHICAGO — La tarde en Wrigley Field se vivió con tensión, expectativa y finalmente, celebración. En un duelo de eliminación, los Cubs se impusieron 3-1 sobre los Padres de San Diego para quedarse con la serie de comodín y avanzar a la Serie de División de la Liga Nacional (NLDS).
Eficiencia desde la lomita
Desde el arranque, Chicago mostró determinación. El abridor Jameson Taillon lanzó 4 entradas en blanco, lo que redujo a la ofensiva de San Diego a apenas dos hits, y ponchó cuatro rivales. Mientras tanto, en la ofensiva, los Cubs tomaron ventaja temprano gracias a un sencillo con bases llenas de Pete Crow-Armstrong frente a Yu Darvish, seguido de un boleto intencional a Dansby Swanson que puso el marcador 2-0.

El momento definitorio llegó en la séptima entrada, cuando Michael Busch sonó un cuadrangular solitario que amplió la ventaja a 3-0. El bullpen hizo el resto, con relevistas controlando el juego a pesar de una reacción tardía de San Diego: Jackson Merrill conectó un jonrón en la novena para la visita, pero Andrew Kittredge emergió para cerrar el partido con dos outs —un rodado y un elevado— y asegurar la victoria.
Fildeo más que correcto
La defensa de los Cubs también fue factor decisivo. Dansby Swanson protagonizó jugadas clave —incluyendo un doble play dentro de una amenaza en el sexto inning— y Nico Hoerner realizó atrapadas oportunas para cortar rallies rivales.
Este triunfo representa la primera serie de postemporada ganada por los Cubs desde 2017, y despierta esperanzas en la fanaticada y el clubhouse por una nueva carrera hacia la gloria.
Ahora, Chicago se prepara para enfrentar al rival de división Milwaukee Brewers en la NLDS, serie que comienza en Milwaukee el próximo sábado.
Con información e imágenes de:
NBC Chicago
CBSSports.com
Laredo Morning Times