Un salto evolutivo que sorprende
Cuando los Mets firmaron a Soto en diciembre de 2024 con un contrato récord de 15 años por 765 millones de dólares, muchos se centraron en su bateo estelar. Lo que pocos anticiparon es que Juan desarrollara una nueva dimensión ofensiva: la amenaza constante como ladrón de bases. En 2025 ha logrado 36 robos, cifra que supera con creces su récord personal previo de 12.
El periodista especializado en béisbol Jeff Passan no ocultó su asombro:
“De todas las cosas increíbles que han sucedido en la temporada 2025… esta es sin duda la más increíble: Juan Soto lidera la MLB en bases robadas en la segunda mitad.”

Más aún: en 58 juegos desde el receso del Juego de Estrellas, acumula 24 estafas —cuatro más que el segundo lugar.
Y no es que intente robar a lo loco: Soto ha sido capturado apenas en cuatro ocasiones durante toda la campaña, lo que habla muy bien de su astucia y percepción de la dinámica de la jugada.
Su eficacia —y su capacidad para combinar poder al bate con velocidad— lo convierte en un fenómeno verdaderamente distinto.
Más que un ladrón: una superestrella completa
Este reconocimiento no es capricho: Soto se ha ganado su lugar en debates de MVP con una temporada monumental. Con 42 cuadrangulares —hasta el momento— ya superó su marca anterior y se convirtió en el primer pelotero de Mets en lograr 40 jonrones y 30 bases robadas en una misma campaña.

El salto de 12 robos máximo en temporadas anteriores a los 30+ este año habla de su evolución mental, física y estratégica. Los Mets no solo adquirieron un bate tremendo, sino una pieza que puede dictar ritmos desde la primera hasta la última base.
Con información e imágenes de:
ESPNdeportes.com
Reuters
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