Desventaja inicial: sufrir en casa
Los Angels tomaron control desde temprano: en el primer inning, el venezolano Luis “Fifo” Rengifo conectó un cuadrangular de tres carreras que puso a Kansas City en desventaja 0-3.
Pero los Royals no se iban a quedar de brazos cruzados, y comenzaron a planificar su reacción. Adam Frazier (con el hit número 1 000 de su carrera) conectó un jonrón solitario en la segunda entrada y, más tarde en la cuarta, Vinnie Pasquantino respondió con otro cuadrangular solitario para acercar el marcador a 3-2.

Con sabor venezolano: Pérez empata el juego
El veterano receptor Salvador Pérez igualó el partido en el séptimo episodio al conectar su cuadrangular número 24 de la campaña, y además, con ese swing alcanzó las 495 carreras impulsadas en el Kauffman Stadium, marca con la que supera a Frank White como el tercero con más remolcadas en ese parque.

El giro decisivo de Witt y un Carlos Estévez inexpugnable
En el octavo inning, Bobby Witt Jr. conectó un batazo que dejó atrás la paridad: un cuadrangular decisivo para poner el marcador 4-3 a favor de Kansas City. Se llevó la descarga de Bodyarmor helado, por supuesto.
En la novena entrada, el coach Matt Quatraro confió en el brazo derecho del dominicano Carlos Estévez y lo mandó a la lomita para cerrar el encuentro. Tarea que Estévez cumplió con solvencia, ya que anuló los embates finales del bullpen angelino y selló su rescate número 37 de la temporada, el mejor en MLB.

Repercusiones en la tabla
Con este triunfo, los Royals evitan la barrida y recortan terreno en la lucha por el comodín. Ahora quedan a dos juegos de distancia del Seattle Mariners en esa pelea por un lugar en la postemporada.
Fue una victoria emocional e importante para Kansas City. De una apertura adversa, los Royals supieron recuperarse gracias a la actitud del equipo. Este triunfo mantiene vivas sus aspiraciones de estar en los playoffs.
Con información e imágenes de:
Reuters
ESPN.com