En plena serie en Minneapolis, Manny Machado alcanzó un nuevo capítulo en su legado: con un sencillo en la sexta entrada, consiguió el hit número 1,000 vistiendo el uniforme de los Padres, una marca que lo consolida entre los pilares históricos de la franquicia.
Pero el momento destacado llegó poco después: en la séptima entrada, Machado conectó un doblete remolcador que rompió el empate 3-3 y desató una furiosa ofensiva de San Diego.
El equipo explotó con un racimo de 7 carreras en ese inning clave. Entre los protagonistas: “El Maracucho” Elias Díaz, quien conectó dos jonrones y sumó tres impulsadas, y Ramón Laureano, autor de un cuadrangular de dos carreras en el octavo inning que selló el marcador 12-3. Por su parte, Fernando Tatis Jr. se fue de 3-2 con una carrera anotada.
El abridor Nick Pivetta realizó una labor sólida (5 innings, tres carreras), y el bullpen respondió sin permitir anotaciones adicionales. La ofensiva llegó con furia justo después de mantener a raya el ataque rival.

Bien encaminados a la postemporada
La velada fue doblemente sonada para Machado, quien convirtió el milestone en el inicio de la ofensiva que puso el rumbo del partido en manos de San Diego. Entre jonrones decisivos y rallies ofensivos, los Padres (76-61) se llevaron una victoria categórica que reaviva su impulso rumbo a la postemporada.
Con información e imágenes de:
MLB.com
Reuters
ESPN.com